lunes, 20 de mayo de 2024

MARRUECOS. VALLE DEL DRAA. DIA 2

Nos hemos levantado sobre las 9, y nuestro primer desayuno ha sido espectacular, con vistas a la kasbah, mientras disfrutábamos del desayuno, planificamos más o menos nuestra ruta de hoy.








Para llegar al desierto hay varias rutas, y hemos decidido hacer una ruta circular, conociendo la zona más sur,  el Valle del Draa, con sus palmerales y su ruta de kasbahs. Una ruta de aproximadamente 3 horas de conducción.





Con un calor de justicia y bien provistas de agua, nos vamos en dirección a Agdz, por una carretera que cruza un desierto muy rocoso y no nos hemos podido resistir a parar cada dos por tres solo por ver el impresionante paisaje que teníamos delante.

Es curioso que estando solas en medio de la nada, disfrutando de las vistas, sin saber de dónde sale, nos aparece de repente un señor, ofreciéndose a hacernos una foto, y claro, nos rompe el encanto del momento y nos vamos de allí.

Llegamos a Agdz, y aparcamos en una plaza, al señor de la tienda de al lado le preguntamos si está bien aparcado el coche ahí, nos dice que si y nos pide, al decirle que éramos de Barcelona, si podemos traducirle al catalán un mensaje de felicitación de cumpleaños para un amigo suyo que vive allí. Entramos en su tienda y después de hacer lo que nos pide, nos invita a un té y estamos un buen rato hablando de diferentes  cosas, mientras intenta que le compremos dátiles o que le cambiemos medicinas por bisutería de su tienda, y una de las cosas que nos comenta es que vayamos a Zagora (nuestro destino) por la antigua carretera que atraviesa el Valle del Draa, es un desvío de unos 30 kms, y por ahí que vamos, realmente ha valido la pena, ha sido algo impresionante.

Agdz



Al fondo nuestro coche negro 



Cruzamos un río muy caudaloso y vamos pasando por palmerales impresionantes y pequeñas kasbah diseminadas aquí y allá y de repente vemos una kasbah muy grande, nos sorprende y decidimos parar a verla mejor,  vemos un cartel que dice que la puerta principal está a 400 mts, al acercarnos nos adelanta un chico hablando por teléfono, y cuando llegamos nos está esperando y aparece un señor vestido de bereber en moto, nos ofrece ver la kasbah por 20 dirhams (2euros) cada una (para seguir con la restauración de la kasbah) y la voluntad por la visita guiada, decimos que si y realmente es alucinante , nos cuenta que ahí se rodó la película de "Babel" de Brad Pit y Kate Blanchet y  alucinamos, se trata de la ksar Tamnougalt, nos lleva por la calle principal, habitaciones, la madraza, la zona bereber y la zona judía, impresionante, luego nos lleva por el palmeral de alrededor y tenemos una vistas increíbles, nos explica el cultivo y la forma de vida de esa gente. La kasbah tiene 400 años , actualmente viven 20 familias pero llegaron a vivir 1600 personas. Acaba la visita, y nos empieza a hablar de manera que no le entendemos nada y nos parece que nos está pidiendo 100 dirhams, intentamos regatear pero pasamos porque al final son 10 euros por una visita que nos ha maravillado, así que bien gastados está. 





Calle principal donde se grabó "Babel"


Sinagoga

Madrasa






La Yoli con el guía (Isham o algo así)

Es increíble que de una casualidad como ha sido dejar el coche aparcado en un sitio cualquiera, puede surgir la oportunidad de descubrir paisajes que te enamoran y de una ruta que en principio era de tránsito, se convierta en una experiencia fabulosa.

Llegamos a Zagora, ha sido divertido encontrar el riad, pues está dentro de la medina y no se puede acceder con el coche, aparcamos en una plaza y al adentrarnos en la medina, todo el mundo que nos cruzábamos iba señalándonos el camino y nos ha parecido cómico, debe ser el único alojamiento de la zona y ver dos guiris por ahí ... Obvio.




Con Omar, nuestro anfitrión ya hemos liado el alojamiento del desierto para el día siguiente, y creemos que a buen precio,mañana nos concretará los detalles para llegar. Así que va todo sobre ruedas.





Salimos a dar un paseo, con idea de cenar algo y en la calle principal por la que hemos llegado a Zagora, no hay nada abierto, estamos a punto de volver al Riad a cenar cuando vemos en Google que justo en la calle paralela está petado de bares, vamos para allí y un ambientazo en la calle tremendo, cenamos un par de pizzas y me pongo a acabar el post de ayer. La temperatura de la calle es calor pero se está bien, apetece no ir a casa pero decidimos ir a descansar, que mañana será un día duro... Por fin, el desierto nos espera.